Planificando nos podemos detener en detalles, evaluar, corregir el tema creado.
Una buena planificación depende de la autoestima del individuo, ya que de nada serviría solo crearla pero no ejecutarla, es por esta razón que opino que debe ser una acción de iniciativa propia de la persona la cual quiere tener tanto un orden como un control en su vida.
Mi tiempo de estudio lo planificaría tomando en cuenta cada una de las cosas que me rodean, las materias que curso, donde comenzaría desde la mas fuerte hasta la mas sencilla, ya que me siento mas relajada cuando creo tener el dominio de la mas larga.
En la página www.aulafacil.com cuyo propósito es dictar cursos de distintas áreas para los estudiantes, me llama mucho la atención lo que citaban de la planificación de estudió, tome algunos puntos importantes para compartirlo con ustedes.
El éxito en los estudios depende en gran medida de una buena planificación.
Los estudiantes que destacan no son habitualmente los más inteligentes, sino aquellos que saben planificar su trabajo, aplican un buen método de estudio, están motivados y tienen mucha confianza en sí mismo.
La planificación del estudio permite obtener mejores resultados y hacer más llevaderos los estudios, evitando en gran medida los temidos momentos de agobio.
No es lo mismo llevar al día las asignaturas y en época de exámenes dedicarse a repasar, que perder el tiempo durante el curso y cuando llegan los exámenes tratar de hacer lo que no se ha hecho antes, con jornadas de estudio maratonianas, agotadoras, con una enorme ansiedad y con muchas probabilidades de que esa gran "paliza" final no sirva para nada (ni para aprobar, ni por supuesto para aprender).
Con una buena planificación y dedicación será capaz de sacar adelante cualquier asignatura por complicada que sea.
Los estudios constituyen su principal obligación y debe afrontarlos con profesionalidad.
Debe ser constante y trabajar diariamente.
Tiene que desarrollar su fuerza de voluntad, siendo capaz de sacrificarse por alcanzar unos objetivos (ya vendrá luego la recompensa
El éxito en los estudios depende en gran medida de una buena planificación.
Los estudiantes que destacan no son habitualmente los más inteligentes, sino aquellos que saben planificar su trabajo, aplican un buen método de estudio, están motivados y tienen mucha confianza en sí mismo.
La planificación del estudio permite obtener mejores resultados y hacer más llevaderos los estudios, evitando en gran medida los temidos momentos de agobio.
No es lo mismo llevar al día las asignaturas y en época de exámenes dedicarse a repasar, que perder el tiempo durante el curso y cuando llegan los exámenes tratar de hacer lo que no se ha hecho antes, con jornadas de estudio maratonianas, agotadoras, con una enorme ansiedad y con muchas probabilidades de que esa gran "paliza" final no sirva para nada (ni para aprobar, ni por supuesto para aprender).
Con una buena planificación y dedicación será capaz de sacar adelante cualquier asignatura por complicada que sea.
Los estudios constituyen su principal obligación y debe afrontarlos con profesionalidad.
Debe ser constante y trabajar diariamente.
Tiene que desarrollar su fuerza de voluntad, siendo capaz de sacrificarse por alcanzar unos objetivos (ya vendrá luego la recompensa
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